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miércoles, 27 de abril de 2011

Selección de ocho libros Sociedad de la información

Selección de ocho libros que me parece son imprescindibles para entender el funcionamiento de la sociedad de la información en la época de los medios digitales.

Convergence Culture. El libro más importante de Henry Jenkins (a quién deberías conocer si estás interesado en el tema de los media studies) introduce una serie de conceptos sumamente útiles y novedosos, entre ellos el enfoque de la convergencia mediática para entender el cambio tecnológico no como un proceso de reemplazos y desplazamientos, sino como uno de prácticas sociales en constante reinterpretación. Jenkins habla también aquí de su concepto de transmedia para ilustrar la manera como tanto los contenidos que consumimos, como nosotros mismos como consumidores, no existimos ya bajo experiencias mediáticas aisladas, sino que participamos de múltiples experiencias en paralelo e incluso en simultáneo, lo cual introduce nuevas demandas y expectativas hacia las narrativas con las que nos involucramos


The Wealth of Networks. He comentado hace poco por qué me parece que este libro de Yochai Benkler es un referente imprescindible: Benkler hace una investigación sumamente detallada sobre las prácticas económicas emergentes en el mundo digital y la manera como estas prácticas están generando una nueva forma de producción. La reducción en los costos de transacción y organización hace viables empresas (en todo el sentido de la palabra) que no están necesariamente motivadas por el lucro, sino que contribuyen a la creación y acumulación de capital social entre las personas que participan de ellas. Benkler analiza las maneras como esta nueva forma de producción tiene un enorme potencial para dinamizar una serie de sectores económicos, pero también evalúa la manera como los actores establecidos están colaborando consciente o inconscientemente para entrampar este nuevo universo productivo en gestación. El texto completo del libro pueden encontrarlo en línea.

Understanding Media. Éste es un poco trampa, porque es el más viejo de la lista. Se trata del texto más importante de Marshall McLuhan, donde se acuñaron expresiones confusas como “el medio es el mensaje” o “la aldea global“. A pesar de ser un texto de 1964, sirve como un adelanto de lo que vendrían a ser las consecuencias de la tecnología electrónica en lo que McLuhan llamaba el “hombre tipográfico”, el hombre propio de una cultura formada a partir de la lógica lineal, secuencial, masiva e industrial de la imprenta y la tipografía. McLuhan es sumamente oscuro en este libro y profundizar en sus ideas es complicado, pero su capacidad para adelantarse a cambios tecnológicos que aún no se hacían presentes es sorprendente. Esto es, quizás, propio además de su concepción de la nueva cultura mediática, una concepción de la tecnología donde los efectos se muestran antes que las causas y donde la linealidad del progreso debe ser abandonada por un entendimiento del cambio mediático como transformaciones cualitativas de nuestro entendimiento del mundo

La era de la información. El magnum opus de Manuel Castells está compuesto por tres volúmenes que establecieron en los 90s la línea de base a partir de la cual entender la sociedad informacional (que, además, distingue por primera vez de la “sociedad de la información”). Castells se da el trabajo de realizar un análisis social de todas las múltiples dimensiones que se ven afectadas por el cambio en los patrones de conducta en la sociedad de la información, cuando dejamos de únicamente circular información (algo propio de todas las sociedades) y la producción, distribución y transformación de información se convierten, más bien, en la actividad económica y social más importante de nuestra cultura. La política, la economía, la identidad, las relaciones sociales, las relaciones internacionales, las afinidades nacionales, el trabajo, el comercio, los medios de comunicación, son sólo algunas de las categorías que Castells evalúa en la manera como se ven impactadas por este cambio fundamental en nuestra actitud hacia el conocimiento y la información


Free Culture. Este libro de Lawrence Lessig, disponible libremente (también en su traducción en español como Cultura libre) explora la relación compleja que se establece en la economía digital con la legislación en derechos de autor. Lessig plantea que, a medida que más y más de nuestra cultura pasa por alguna forma mediática y tecnológica, y a medida que nuestro uso de la tecnología nos permite hacer cosas nuevas antes impensables, la legislación que regula nuestro consumo de información y de productos culturales no se ha mantenido igualmente dinámica. El aparato legal existente ha llevado a la sociedad a una posición donde una mayoría se ha vuelto delincuente por hacer algo que parece completamente cotidiano y coherente, y en ese sentido la ley se ha vuelto un obstáculo para el florecimiento de nuevas producciones culturales, en lugar de un incentivo. En este libro Lessig establece los fundamentos sobre los cuales se construirá luego el movimiento Creative Commons.


The Long Tail. Chris Anderson, el editor de la revista Wired, introdujo la idea de la larga cola en un artículo para la misma revista en el 2004 (disponible traducido al español) que luego expandió en un libro del mismo nombre. La idea de la larga cola es simple: la tecnología hace que sea más fácil tanto producir como consumir, y esto es en sí mismo un incentivo para que más personas produzcan más cosas en torno a intereses cada vez más específicos, al mismo tiempo que los consumidores pueden fácilmente encontrar cosas por específicas a sus gustos que sean, dado que Internet (con herramientas como Google) hacen muy sencillo conectar la oferta con la demanda. Lo que esto hace posible, sobre todo respecto a economías de bienes virtuales, es que la larga cola de la distribución de Pareto, o todos aquellos productos que antes fueron comercialmente inviables, se vuelven ahora un espacio de oportunidades por explotar en la medida en que se puede agregar la demanda por ellos. Esto abre la puerta para una nueva generación de emprendimientos digitales de pequeña y mediana escala (o incluso enorme escala, como Amazon).


Inteligencia colectiva. Pierre Lévy subtitula esta obra “Por una antropología del cibersespacio”. Lévy explora la manera como el ciberespacio está transformándonos cognitivamente y replanteando nuestras asociaciones sociales en torno a la resolución de problemas. En la sociedad informacional hay tanta información que procesar que es imposible que ningún individuo emprenda esa tarea por sí mismo, pero incluso aquello que un individuo sí necesita procesar es demasiado para sus propias capacidades. Pero esta nueva imposibilidad viene de la mano con tecnologías que nos permiten compartir, cooperar y colaborar de maneras mucho más sencillas que cualquier otra forma conocida, lo cual hace posible que se construyan así inteligencias colectivas: redes conectadas de individuos donde ningún individuo puede saberlo todo, pero todos pueden saber algo y compartirlo con los demás. Para Lévy, éste s el punto de partida de toda una serie de transformaciones en nuestras organizaciones sociales, pues este nuevo principio subvierte la existencia de jerarquías verticales y transforma el significado de ejercer un rol o una función en una organización o estructura social. El texto completo en español se encuentra disponible en línea gracias a una edición virtual de la OMS.


 
Everything is Miscellaneous. El tema epistemológico es también el interés de David Weinberger, aunque Weinberger lo trabaja más bien desde el punto de vista de cómo ordenamos los conceptos. Según Weinberger, nuestro entendimiento del ordenamiento de la información en la forma de categorías excluyentes es propio de una sociedad que ordena su información utilizando un espacio físico: como el espacio es finito y tiene una serie de características limitantes para la disposición de las cosas, nos hemos visto obligados a adaptar nuestros esquemas mentales a nuestros esquemas físicos. Nuestras mentes, básicamente, funcionan como archivadores, o como librerías. Pero la web elimina esa condición básica: el espacio se vuelve virtualmente infinito, la cantidad de contenido que almacenar y ordenar también, y no se aplican las mismas limitaciones que tenemos en el espacio físico. De repente nos vemos enfrentados a un mundo en el cual todo puede encajar bajo múltiples categorías al mismo tiempo sin que eso sea un problema, excepto porque se vuelve una inmanejable sobrecarga de información. La solución para Weinberger es contraintuitiva: la solución a la sobrecarga de información es más información, información sobre información, para navegar esta nueva red de conocimiento. La información se vuelve un commodity, y saber navegarla y encontrar lo importante se vuelve la habilidad realmente valiosa. El prólogo y el primer capítulo del libro se encuentran disponibles en su sitio web.

fuente

http://www.mutaciones.pe/2010/06/29/ocho-libros-fundamentales-para-entender-la-sociedad-de-la-informacion/



 

lunes, 25 de abril de 2011

Saskia Sassen, investigadora de las ciudades globales

Gobiernos de bolsillo:
"estudio cómo el poder y el dinero convierten fronteras y estados en sus instrumentos y las ciudades en sus escenarios"

Junto con el Nobel Joseph Stiglitz, Saskia Sassen estudia las nuevas estrategias del capitalismo globalizado en la Universidad de Columbia. Y anda ahora fascinada por cómo los primeros ministros crean sus kitchen cabinet, sus gobierno de bolsillo, para eludir el control parlamentario y, entre elecciones y elecciones, mandar a su antojo con sus propios interlocutores sin dar cuentas a nadie. Esos minigobiernos suelen integrarlos los responsables de la Economía –más o menos en la sombra– y los asesores favoritos del presidente. Así el resto de ministros, su partido y, por supuesto, los diputados suelen convertirse en meras comparsas de las decisiones que cada vez toman menos personas.

Sabe quiénes son hoy los más nacionalistas?
¿...?
Las clases medias.
¿Por qué?
Porque las clases altas son cosmopolitas: si ellos pueden elegir lugares de todo el planeta... ¿Por qué se van a limitar a invertir, vivir o relacionarse en un solo estado?

Y las clases bajas también son cosmopolitas y globalizadas, pero justo por lo opuesto, porque no pueden elegir. Son emigrantes.

Buscan integrarse en un país próspero.
Y se van volviendo nacionalistas en la medida en que reciben los beneficios de ser ciudadanos del Estado de acogida. Es decir, se hacen nacionalistas en la medida en que progresan hasta formar parte de la clase media.

¿Vamos a un mundo más nacional o más globalizado?
Depende de lo que convenga a quienes manden en cada momento. Fíjese en la última crisis financiera: al principio era global...

Más global, imposible.
... Sin embargo, las soluciones han tenido que ir dándolas a nivel nacional los estados, que se han endeudado para pagar esas deudas creadas por las corporaciones financieras globalizadas.

Y aún las pagaremos durante años.
Así que los contribuyentes, la clase media, de cada Estado no han gozado de los beneficios de la globalización financiera, pero ahora están obligados a pagar sus abusos con impuestos y recortes de salarios y empleos.
No dice usted nada nuevo.
Pero es que además lo hemos demostrado.

¿Cómo?
Carlos Ratti y yo diseñamos un software que registraba todas las llamadas telefónicas de la ciudad de Nueva York: adónde llamaban los neoyorquinos; a qué horas y de dónde les llamaban.

Sugerente.
Lo titulamos Two geographies of talk (Dos geografías de la conversación) y lo que demostró el proyecto es que las clases más altas y las más bajas eran las más globalizadas, las más internacionalistas.


¿Sólo por los países con los que hablan?
Ccreo que es un indicador definitivo. Las clases más altas tenían sus redes sociales esparcidas por todo el planeta, como las más bajas. Aunque por diferentes motivos, claro.
¿...?

El inmigrante busca una patria que le mantenga y el millonario puede tenerlas todas.
¿Y si sólo fuera así en Estados Unidos?
Los resultados del estudio no diferirían demasiado en Barcelona o en cualquier ciudad de la Unión Europea.

¿Y la clase política?
En EE.UU. desde luego no se distinguen por su cosmopolitismo: más del 30 por ciento de los miembros del Congreso no tienen pasaporte, porque nunca lo han necesitado. Nunca han viajado fuera de su país.
Muy cosmopolitas no parecen.

Su mundo es EE.UU. En cambio, en Europa, el concepto de “la capital del Estado” que en los siglos XIX y XX era el lugar donde estaba el teatro nacional; la ópera nacional; el museo nacional... ¡lo mejor de la cultura de cada país!, ahora está en crisis.

 
¿Por qué?

Porque las nuevas élites ya no quieren sólo una capital nacional, sino que disponen de una red de ciudades cosmopolitas a su antojo y las usan todas: van de compras a Nueva York; ven ópera en Viena; moda en París o un estreno de teatro en Londres.

Pero en algún sitio tienen que vivir.
Suelen tener viviendas en varias ciudades y se mueven entre ellas. Aunque lo decisivo es que ya no necesitan proyectarse como élite en su capital como antaño. De forma que esos proyectos nacionales de capital se han quedado funcionariales y anticuados.
También está el turismo low-cost.

Las clases medias imitan a las altas y también juegan a su propia red de ciudades en las que proyectarse, pero más barato. Y de ese modo, las grandes capitales, como Barcelona, ya no son sólo de Catalunya o de España, sino que son parte de la red cosmopolita de ciudades globales a las que va viajando todo el mundo durante todo el año.

 
¿Cuántas son?
Unas setenta en todo el planeta y desde luego Barcelona y Madrid están entre ellas.

 
Capitales que hablan muchas lenguas.
Es un signo de su éxito. Esas urbes ya no son sólo capitales con lo mejor de un país, sino parte de una red de lo mejor del mundo. Y, además, ya no son sólo la capital de sus élites nacionales, sino también un escaparate de las minorías de todo el planeta.

¿En qué sentido?
Sabrá usted que está en una ciudad global, porque la eligen para vivir los colectivos homosexuales, minorías etnicas, creadores inconformistas, innovadores desclasados...

 
¿Y eso es bueno?
Siempre lo ha sido. La novedad es que antes ese paisaje sólo aparecía en las megacapitales: París, Londres, Nueva York... En cambio, ahora, ese nuevo tejido social distingue a todas las ciudades de la red cosmopolita.
Eso es globalización por abajo.


Y por arriba: la mayoría de los edificios emblemáticos de esas setenta capitales mundiales como Barcelona no son propiedad de sus ciudadanos, sino de fondos globales con pabellón de conveniencia: el Empire State no es estadounidense como tampoco los grandes edificios parisinos o londinenses son de propiedad francesa o británica.

miércoles, 13 de abril de 2011

Psiconeuroinmunobiología. Entrevista al Dr. Mario Alonso Puig. Por Ima Sanchís


Hasta ahora lo decían los iluminados, los meditadores y los sabios; ahora también lo dice la ciencia: son nuestros pensamientos los que en gran medida han creado y crean continuamente nuestro mundo.
“Hoy sabemos que la confianza en uno mismo, el entusiasmo y la ilusión tienen la capacidad de favorecer las funciones superiores del cerebro. La zona prefrontal del cerebro, el lugar donde tiene lugar el pensamiento más avanzado, donde se inventa nuestro futuro, donde valoramos alternativas y estrategias para solucionar los problemas y tomar decisiones, está tremendamente influida por el sistema límbico, que es nuestro cerebro emocional. Por eso, lo que el corazón quiere sentir, la mente se lo acaba mostrando”. Hay que entrenar esa mente.
MARIO ALONSO PUIG :Tengo 48 años. Nací y vivo en Madrid. Estoy casado y tengo tres niños. Soy cirujano general y del aparato digestivo en el Hospital de Madrid. Hay que ejercitar y desarrollar la flexibilidad y la tolerancia. Se puede ser muy firme con las conductas y amable con las personas. . Acabo de publicar Madera líder (Empresa Activa)
-Más de 25 años ejerciendo de cirujano. ¿Conclusión?
-Puedo atestiguar que una persona ilusionada, comprometida y que confía en sí misma puede ir mucho más allá de lo que cabría esperar por su trayectoria.
-¿Psiconeuroinmunobiología? -Sí, es la ciencia que estudia la conexión que existe entre el pensamiento, la palabra, la mentalidad y la fisiología del ser humano. Una conexión que desafía el paradigma tradicional. El pensamiento y la palabra son una forma de energía vital que tiene la capacidad (y ha sido demostrado de forma sostenible) de interactuar con el organismo y producir cambios físicos muy profundos.
-¿De qué se trata? -Se ha demostrado en diversos estudios que un minuto entreteniendo un pensamiento negativo deja el sistema inmunitario en una situación delicada durante seis horas. El distrés, esa sensación de agobio permanente, produce cambios muy sorprendentes en el funcionamiento del cerebro y en la constelación hormonal.
-¿Qué tipo de cambios? -Tiene la capacidad de lesionar neuronas de la memoria y del aprendizaje localizadas en el hipocampo. Y afecta a nuestra capacidad intelectual porque deja sin riego sanguíneo aquellas zonas del cerebro más necesarias para tomar decisiones adecuadas.
-¿Tenemos recursos para combatir al enemigo interior, o eso es cosa de sabios? -Un valioso recurso contra la preocupación es llevar la atención a larespiración abdominal, que tiene por sí sola la capacidad de producir cambios en el cerebro. Favorece la secreción de hormonas como la serotonina y la endorfina y mejora la sintonía de ritmos cerebrales entre los dos hemisferios.
-¿Cambiar la mente a través del cuerpo? -Sí. Hay que sacar el foco de atención de esos pensamientos que nos están alterando, provocando desánimo, ira o preocupación, y que hacen que nuestras decisiones partan desde un punto de vista inadecuado. Es más inteligente, no más razonable, llevar el foco de atención a la respiración, que tiene la capacidad de serenar nuestro estado mental.
-¿Dice que no hay que ser razonable? -Siempre encontraremos razones para justificar nuestro mal humor, estrés o tristeza, y esa es una línea determinada de pensamiento. Pero cuando nos basamos en cómo queremos vivir, por ejemplo sin tristeza, aparece otra línea. Son más importantes el qué y el porqué que el cómo. Lo que el corazón quiere sentir, la mente se lo acaba mostrando.
-Exagera. -Cuando nuestro cerebro da un significado a algo, nosotros lo vivimos como la absoluta realidad, sin ser conscientes de que sólo es una interpretació n de la realidad.
-Más recursos… -La palabra es una forma de energía vital. Se ha podido fotografiar con tomografía de emisión de positrones cómo las personas que decidieron hablarse a sí mismas de una manera más positiva, específicamente personas con transtornos psiquiátricos, consiguieron remodelar físicamente su estructura cerebral, precisamente los circuitos que les generaban estas enfermedades.
-¿Podemos cambiar nuestro cerebro con buenas palabras? -Santiago Ramon y Cajal, premio Nobel de Medicina en 1906, dijo una frase tremendamente potente que en su momento pensamos que era metáforica. Ahora sabemos que es literal: “Todo ser humano, si se lo propone, puede ser escultor de su propio cerebro”.
-¿Seguro que no exagera? -No. Según cómo nos hablamos a nosotros mismos moldeamos nuestras emociones, que cambian nuestras percepciones. La transformació n del observador (nosotros) altera el proceso observado. No vemos el mundo que es, vemos el mundo que somos.
-¿Hablamos de filosofía o de ciencia? -Las palabras por sí solas activan los núcleos amigdalinos. Pueden activar, por ejemplo, los núcleos del miedo que transforman las hormonas y los procesos mentales. Científicos de Harward han demostrado que cuando la persona consigue reducir esa cacofonía interior y entrar en el silencio, las migrañas y el dolor coronario pueden reducirse un 80%.
-¿Cuál es el efecto de las palabras no dichas? -Solemos confundir nuestros puntos de vista con la verdad, y eso se transmite: la percepción va más allá de la razón. Según estudios de Albert Merhabian, de la Universidad de California (UCLA), el 93% del impacto de una comunicación va por debajo de la conciencia.
-¿Por qué nos cuesta tanto cambiar? -El miedo nos impide salir de la zona de confort, tendemos a la seguridad de lo conocido, y esa actitud nos impide realizarnos. Para crecer hay que salir de esa zona.
-La mayor parte de los actos de nuestra vida se rigen por el inconsciente. -Reaccionamos según unos automatismos que hemos ido incorporando. Pensamos que la espontaneidad es un valor; pero para que haya espontaneidad
primero ha de haber preparación, sino sólo hay automatismos. Cada vez estoy más convencido del poder que tiene el entrenamiento de la mente.
-Deme alguna pista. -Cambie hábitos de pensamiento y entrene su integridad honrando su propia palabra. Cuando decimos “voy a hacer esto” y no lo hacemos alteramos físicamente nuestro cerebro. El mayor potencial es la conciencia.
-Ver lo que hay y aceptarlo. -Si nos aceptamos por lo que somos y por lo que no somos, podemos cambiar. Lo que se resiste persiste. La aceptación es el núcleo de la transformación.
Entrevista aparecida en La Vanguardia Digital

lunes, 11 de abril de 2011

“El 95% de los alumnos son creativos y sólo lo son el 5% de los adultos, ¿Qué ha pasado?”

Son palabras de Saturnino de la Torre, catedrático de Didáctica e Innovación Educativa en la Universidad de Barcelona, que lo dicen todo. Una educación que mata la creatividad no merece tal nombre, se queda en mera instrucción…. ¿instrucción para qué…? Basta echar una mirada a los conflictos que tratan de envolvernos para comprender que está sustentando nuestra enseñanza.
            Los problemas son un reto a nuestra creatividad, si en nuestras escuelas no la fomentamos lo que conseguiremos es  vernos cada vez más pequeños ante estos problemas, tendremos una humanidad de “liliputenses”. Un ser humano que delega su creatividad en otros está entregando algo más que su libertad, está desposeyéndose de su más rica esencia.
            Nuestra enseñanza tiene que ser fiel defensora de esta esencia, para lo cual ha de cambiar radicalmente el ambiente educativo. No se trata de inculcar nada en nuestras aulas, sino de convertirlas en una tierra fértil para esas semillas de humanidad que son nuestros niños y adolescentes, semillas que encierran grandes tesoros y misterios. Reconocer como tales, a nuestros hijos y alumnos, transforma  nuestra mirada pedagógica, convirtiéndonos en auténticos buscadores de tesoros.
            Saturnino De la Torre ha enseñado durante años  a los maestros a convertirse en esos buscadores de tesoros. Te invito a disfrutar de sus palabras, de su experiencia, de su creatividad, pero sobre todo de su presencia, ¡qué lo disfrutes!


"Cuando a una persona se la reconoce, crece"

Entrevista en “La Contra” de  “La Vanguardia” realizada por Ima Sanchís (4-3-2011)


Tengo 69 años. Nací en Valladolid y vivo en Barcelona.Doctor en Filosofía y Letras. Llevo trabajando, estimulando e investigando sobre creatividad 38 años. Tengo 2 hijos y 2 nietos. En política me parece prioritaria la ética por encima del discurso. Creo en la trascendencia.


¿Qué aprendió como maestro?
Lo importante que es el cariño, el trato, el generar confianza... Transmitir al alumno la idea de que crees en él.

¿En todos?
Todo alumno tiene al menos una capacidad que le hace sobresalir; debemos ayudarle a encontrarla, porque cuando a una persona se la reconoce, crece y se entrega al aprendizaje. La ciencia nos está demostrando que pensamiento y emoción están unidos, así nace un nuevo concepto...

Sentipensar.
No hay ninguna acción humana, dice el biólogo Maturana, sin una emoción que la establezca y la torne posible como acto. Tanto el pensar como el actuar ocurren en el espacio determinado por las emociones.

¿Y cómo se lleva a las aulas?
Siendo conscientes de que se aprende con todo el cerebro. Palabra, imagen, música, símbolos, se refuerzan unos a otros.

¿Eso significa que hay que relacionar la música con las matemáticas y la lengua?
Sí, se trabaja con proyectos integradores de varias disciplinas, se incorpora la vida en el aula.

¿Y qué conseguimos con eso?
Hasta ahora nuestra educación ha estado basada en contenidos empaquetados y el alumno se ha alimentado de este tipo de comida.

No suena muy bien.
Es necesario otro tipo de alimentación que les ayude a desarrollar competencias, conocimientos, habilidades, actitudes, valores... Estamos formando a la persona, al ser.

Cuénteme sus experiencias.
Hay jóvenes que han llegado al bachillerato sin sentir ningún tipo de emoción hacia el conocimiento, sencillamente porque hemos sacado la emoción de las aulas.

Puro trámite para el futuro.
"Sentipensar. Fundamentos y
estrategias para reencantar
la educación", es un libro que
escribió en colaboración con
María Cándida Moraes
Así es. Hay que cambiar la conciencia, en la educación hacen falta reformas de base, de visión, darnos cuenta de lo importante que son los valores, las relaciones. Mi función no es enseñar, sino hacer que el alumno aprenda.

Está claro que algo falla.
Hemos pasado por cuatro grandes etapas en la educación. En la era agrícola el fundamento de la educación eran las creencias. En el siglo XVIII vino la industrialización y con ella la instrucción, el conocimiento de la ciencia. En los años ochenta aparecen las telecomunicaciones y pasamos de los conocimientos a las competencias, del creer al tener: conocimientos, riqueza, poder...


¿Y ahora?
Estamos en el saber hacer, y debemos educar para ser. Simplificando mucho, educar es sacar las capacidades y la bondad que hay en las personas. En todo ser humano hay creatividad y hay bondad, ¿por qué no tratar de compartirla?

La creatividad es uno de sus temas.
Treinta y ocho años de investigación. En la infancia tenemos un gran potencial creativo que luego queda dormido y emerge, en el mejor de los casos, ante la necesidad, ante la adversidad. ¿No sería mejor incorporarlo como herramienta desde la infancia?

¿Cómo?
Eso es lo más fácil: hay que dejar hacer. El 95% de los alumnos son creativos y sólo lo son el 5% de los adultos, ¿Qué ha pasado?

¿Se ha perdido por el camino?
Sí, por los patrones cerrados de la educación y de la sociedad. El alumno tiene capacidad de crear ideas, de inventar, de vibrar, de emocionarse. Y la emoción es el patrón más importante para que la creatividad emerja.

¿Y para mantenerla a flote?
Favoreciendo su expresión y educándola de acuerdo a las edades: en la primera infancia se expresa a través de la fantasía; en la edad escolar, en la aventura y la incitación al descubrimiento; en la adolescencia, en los retos, y en la juventud, en la búsqueda de las innovaciones y la proyección social. Y se trabaja a través de proyectos integradores.

¿Y cuál es la esencia de esos proyectos?
El camino es crear las condiciones para que emerja la creatividad en ellos y aplaudirla. Si un alumno interviene con algo creativo hay que aplaudirle literalmente. La sensación que siente por ese reconocimiento de su profesor y compañeros es imborrable. Si reconoces una cosa pequeña, se multiplica.

Creatividades hay muchas. ¿Qué hay que aplaudir?
La creatividad debe llevar valor, salir de sí para que el otro se beneficie, y cuando los demás reciben eso y se emocionan, y sienten y les toca, la creatividad se contagia y se multiplica. Se trata de crear habilidades, actitudes, hábitos, competencias básicas.

Entiendo.
Hay que formar en la flexibilidad, que es uno de los valores importantes junto a la adaptación de la creatividad, quien los ha asumido no tendrá fracasos porque será capaz de mudar, de adaptarse a situaciones.

... Condición para la felicidad.
Se trata de crear un escenario más que un aula, de utilizar toda clase de recursos que tengan un componente emocional. Detrás de cada gran idea hay una emoción, una profunda pasión, un deseo, una necesidad de hacer y de comunicar.

¿No le pedimos demasiado a las aulas?
Cuando estoy enseñando matemáticas, con mi manera de hacer estoy transmitiendo unos valores implícitos. Cuando tomo conciencia de ellos y los hago explícitos toman un valor mayor: el del sentido.

Lo mejor de uno
            
           Empezó siendo profesor de primaria y de bachillerato hasta que entendió que a quien había que formar era al profesorado. Ha sido coordinador del Grupo de Investigación y Asesoramiento Didáctico, promotor de la Red Internacional de Creatividad y presidió la Asociación para la Creatividad. Toda su vida ha girado en torno a la innovación educativa, la creatividad y su estimulación, con más de cuarenta títulos publicados. "Educar es sacar lo mejor de cada persona", asegura. Para él, nunca es tarde para aprender a vivir y a relacionarse, por eso impulsa el III Forum Internacional Innovación y Creatividad. La adversidad como oportunidad (sidtransdiciplina@yahoo.es).


    “El buen educador ha de tener algo de marino, un poco de poeta y mucho de pirata”. Es una expresión de Saturnino De La Torre, ¿sientes curiosidad por saber qué puede aportar la piratería a la enseñanza…? La frase fue dicha en su intervención en el “Primer Congreso de Niños del Tercer Milenio”. Te propongo desvelar el misterio viendo y oyendo su ponencia en dicho congreso. Ponte cómodo  y prepárate a disfrutar de 15 deliciosos minutos.
Educar sintiendo -sentipensar - Ponencia de Saturnino De La Torre from arcoirisdan on Vimeo.


Si quieres leer con tranquilidad  el poema con el que terminó su intervención Saturnino dirígete a la siguiente dirección:
ninostercermilenio.blogspot.com/​2010/​04/​extraordinario-exito-del-congreso.html

Puedes ver un resumen del Congreso Niños del Tercer Milenio en:
ninostercermilenio.blogspot.com/​2010/​10/​video-resumen-del-congreso-ninos-del.html
 
http://wwwvivencias12.blogspot.com/2011/03/el-95-de-los-alumnos-son-creativos-y.html
 
 

martes, 5 de abril de 2011

Nueva generación de farmacos para la Hepatitis C -Vall d'Hebrón

  •  Una nueva generación de farmacos mejora el tratamiento de la hepatitis C
  • Una infeccion silenciosa

I-Articulo  -La vanguardia 31-marzo 2011
Josep Corbella
Dos tercios de los pacientes con hepatitis C pueden curarse con una nueva generacion de farmacos antivirales que se presentan hoy en la revista The New Englang Journal of Medicine
Hay mas de 170 millones de personas afectadas en el mundo, una parte logran eliminar el virus sin saberlo,pero una proporción importante de casos la infeccion se cronifica y puede evolucionar con los años hacia la fibrosis, la cirrosis o el cancer de higado.

Los nuevos estudios con los farmacos combinados de interferón y rividamina se le añade el inhibidor de proteasas, el boceprevir.  La anemia es el efecto secundario mas importante obligando administrar EPO eritropoyetina. El tratamiento dura entre 6 meses y un año. 
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II-Articulo:Fecha de publicación: 1 de abril de 2011
La combinación de tres fármacos permite eliminar el virus de la hepatitis C en pacientes de forma más eficaz que el actual tratamiento con dos medicamentos, según un estudio del Hospital Henry Ford en Detroit (Estados Unidos) que se publica en la revista "The New England Journal of Medicine". Los autores destacaron que este trabajo representa un importante avance y una posible cura para las personas con hepatitis C que no han respondido a terapias anteriores.
La mayoría de personas infectadas con hepatitis C se mantienen sin síntomas durante años. Cuando los síntomas de enfermedad hepática avanzada se producen, a menudo es demasiado tarde para ofrecer los actuales tratamientos. La infección podría conducir a cicatrización del hígado (cirrosis), cáncer de hígado o a la necesidad de un trasplante de este órgano. En la actualidad no existe vacuna para la hepatitis C. "Pronto tendremos un nuevo estándar de tratamiento para los pacientes de hepatitis C. Este estudio abre una nueva era de desarrollo farmacológico que proporcionará una variedad de agentes antivirales para tratar la hepatitis C", explicó Stuart C. Gordon, responsable del estudio.
Los investigadores asignaron de forma aleatoria a los pacientes a uno de tres grupos. En los tres grupos, los pacientes recibieron el tratamiento estándar con los fármacos peginterferona y ribavirina durante cuatro semanas. Un grupo control recibió esta combinación de fármacos durante 44 semanas más, el segundo grupo recibió además boceprevir durante 32 semanas y los pacientes con un nivel de virus de hepatitis C detectable a las ocho semanas de tratamiento recibieron placebo más peginterferona y ribavirina durante 12 semanas adicionales, mientras que el tercer grupo recibió boceprevir más peginterferona-ribavirina durante 44 semanas. Boceprevir es un inhibidor de la proteasa, una nueva clase de agente antiviral de actuación directa que se dirige e inhibe específicamente la replicación del virus de la hepatitis C.
Los resultados mostraron que la tasa de respuesta virológica mantenida, la pérdida del virus, fue significativamente superior en los dos grupos de boceprevir que en el grupo control. Entre los pacientes con un nivel de virus indetectable en tratamiento a las ocho semanas, la tasa de respuesta virológica mantenida fue del 86% después de 32 semanas de terapia triple y de un 88% después de 44 semanas de terapia triple. La respuesta virológica mantenida generalmente se traduce en una erradicación a largo plazo del virus. "Podemos concluir que boceprevir, cuando se añadía a la peginterferona y la ribavirina, conduce a elevadas tasas de respuesta virológica mantenida en pacientes de difícil tratamiento", indicó Gordon.